sábado, 22 de junio de 2013

No viva en modo emocional.

No existe otra manera de demostrar como nos encontramos interiormente que a través de las emociones. Nos emocionamos al ver una película, escuchar una canción, ver a la persona amada y todo aquello que nos llama la atención de una manera especial . Esto no es algo malo, es demasiado bueno para nuestro ser. Es la forma de comunicarnos con el mundo y existen muchas como: miedo, alegría, tristeza, felicidad, enojo, duda, asombro, culpa... Todas ellas duran un lapso determinado, no son para siempre debido a que solo son pequeños momentos cuando se activan y se acaba su efecto. Algunas personas se encuentran felices y luego de 3 minutos tristes, es por eso que ellas no son dignas de confianza. Cuando una persona basa su vida por emociones, fracasa una y otra vez en todas sus áreas. Un ejemplo claro de personas emocionales son los adolescentes, hoy están alegres, mañana llorando y pasado mañana riendo. Es normal, están en su etapa de formación, el problema reside cuando son personas adultas y siguen actuando como si fuesen adolescentes. Viven dependiendo de su estado de ánimo. Hoy te dicen que están contigo y mañana quién sabe. Hacen todo sin convicciones y tomar una decisión bajo el efecto del emocionalismo es sacar un boleto al desastre. Hay una frase que dice: No prometas cuando estás feliz, no respondas cuando estás enojado y no decidas cuando estás triste. La gente debería moverse por sus convicciones y no por sus emociones. Convicción es estar convencido de algo, hacer lo que hacemos porque creemos firmemente en lo que estamos haciendo. Si estas triste, alegre, enojado o dubitativo, cual sea tu estado de animo, no interesa cuando se tienen convicciones. El convencido actúa fielmente a lo que cree. Aprender a no tomar decisiones por lo que sentimos y si por lo que creemos, te va a llevar a librarte de muchos problemas. Acaso cuando estamos completamente felices, ¿no nos sentimos como un super héroe? No hay nada que pueda arruinar un momento de felicidad, estamos demasiado extasiados que decidimos en el momento sin pensar en las consecuencias, porque claro, todo en ese tiempo está bien. No se trata de vivir el presente sin importar que vaya a traer el futuro, porque el futuro se construye con tu presente. Así que, podemos decir que: Hoy somos lo que decidimos ayer y mañana seremos lo que decidamos hoy. Dejemos de actuar por lo que sentimos, al fin y al cabo no creo que algún plan que se haya tomado por emoción fue fructífero. Observen a su alrededor, ¿qué es lo que se ve?, se ve una generación de padres adolescentes porque en el momento de mantener relaciones sexuales, estaban tan emocionados que se olvidaron las consecuencias de sus actos. No comentamos el error de guiar nuestra vida por un "sentir", seamos plenamente convencidos de lo que estamos por hacer. Piense, piense, piense... y no viva en modo emocional.

No hay comentarios:

Publicar un comentario